Bergen



Bergen es la segunda ciudad más grande de Noruega, superada solo por Oslo. De ella se dice que es la puerta de entrada a los famosos fiordos noruegos. Así que es un punto clave de nuestro itinerario.

Hemos visto un fiordo desde el aire y esta vez queremos sentirnos pequeños ante la inmensidad del fiordo Osterfjord. Queremos tocar el agua, sentir la brisa en la cara, pasar frío si hace falta...

Tenemos pocas horas y hay que aprovecharlas al máximo, así que al llegar vamos directos al muelle desde donde saldrá nuestra embarcación.

Las gaviotas parecen enseñarnos el camino...



El "Whitelady" es un barquito antiguo y lento que nos adentra poco a poco por el fiordo. El paisaje verde se funde con el gris del día lluvioso que nos acompaña.

 


A medida que se hace más estrecho, las montañas se hacen más y más altas...









 Después de 4 horas de crucero, llegamos de nuevo a Bergen. Para nuestra siguiente visita nos toca cambiar de medio de transporte. Esta vez iremos en funicular.

Sabemos que los dias nublados son los menos indicados para subir al Monte. Además de la niebla, nos acompaña una fina lluvia muy característica de Bergen, pero aún así, tenemos los tickets comprados y nos hace especial ilusión subir.





Una vez arriba nos llevamos una grata sorpresa... tenemos una vista de Bergen y su entorno más que satisfactoria!
Yo me pregunto como será en un dia soleado y claro.


Con las fotos panorámicas de rigor capturadas, es el momento de adentrarse en el Monte Floien.
Parece un bosque sacado de un cuento mágico...

La lluvia sigue cayendo pero parece no mojarnos.
El suelo es como una gran alfombra mullida. Amortigua el ruido de las pisadas y a medida que nos adentramos, el silencio es casi absoluto.

Y de repente, notamos que no estamos solos...
En este bosque hay criaturas escondidas, vigilan en silencio.



Que divertido es hacerse fotos con estos simpaticos trolls!!
Los hay por todas partes... y de todos los tamaños.






Menos mal que nos hemos decidido a subir al Monte. A merecido la pena y mucho! 


Antes de decir adiós a Bergen, queremos visitar el centro...
"Bryggen" el muelle hanseático, con sus características casas de colores con vistas al puerto son muy bonitas. 






También nos da tiempo a ver la Torre Rosenkrantz, aunque decidimos no subir.



Y al llegar al Mercado de pescado, no podemos resistir la tentación de comprar carne de ballena. La idea es comprarla en el mercado de Kristiansand, pero encontramos un vendedor que habla español que nos atiende de maravilla. No podemos irnos sin comprar!

Había leído en algún foro que la calidad en Bergen era más buena, pero a la vez más cara. (60€ el kilo)
No sabeis lo que me alegro de haberla comprado en Bergen. Resultó que en Kristiansand no había!!!




Resta del viatge per etapes:






Comentarios

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